Hoy, 11 de septiembre, conmemoramos a San JUAN GABRIEL PERBOYRE, Mártir.
SAN JUAN GABRIEL PERBOYRE (1802-1840) nació en Puech, en el sur de Francia, en una familia pobre pero muy religiosa.
El niño Jean-Gabriel nació en la difícil época de las guerras de Napoleón Bonaparte. Dos hermanos suyos ingresaron al seminario de Montauban, en Tarn-en-Garonne. Siguiendo su ejemplo, él también decide consagrar su vida a Dios.
Así, a los dieciocho años se encuentra estudiando teología en París, en la casa madre de la congregación de los Lazaristas, y es ordenado sacerdote en 1826.
Durante casi diez años, San Juan Gabriel Perboyre fue maestro de novicios en la misma Casa, pero en 1835 vio la oportunidad de realizar su sueño misionero, y se embarcó rumbo a China.
Primeramente llegó a Macao, donde se preparó varios meses para su misión estudiando chino, y al cabo fue designado primer vicario general en la provincia de Honán, al centro sur de China.
En este lugar realiza una labor apostólica intensa. Después de un año y medio, en 1838 es transferido a la provincia de Hupeh, donde renueva sus esfuerzos misioneros.
Al poco tiempo, sin embargo, se desató una cruenta persecución anticristiana, y los predicadores europeos se vieron obligados a dispersarse e intentar huir a sitio seguro.
San Juan Gabriel pasó algunos meses escondiéndose, pero un joven que siempre había sido amable y se había mostrado fiel, lo traicionó revelando a las autoridades su paradero.
En consecuencia, fue capturado en septiembre de 1839 en Tchayuenkeu y llevado a Kwangytang, el primer lugar donde lo interrogaron y torturaron. Luego de repetir esta rutina en varios lugares, terminó recluido en la infame prisión de Wuchang.
Condenado a muerte, San Juan Gabriel Perboyre soportó largos meses de torturas chinas, hasta que llegó la ratificación de la sentencia por parte del emperador. Sus verdugos lo crucificaron, igual que a Jesús, y durante su agonía lo siguieron haciendo sufrir con golpes de espada.
El proceso de beatificación se inició al poco tiempo de su muerte, pero no fue sino hasta 1996 que San Juan Gabriel Perboyre fue canonizado por el papa Juan Pablo II.
SAN JUAN GABRIEL PERBOYRE nos enseña el valor de conservar la fe hasta las últimas consecuencias.
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SAN JUAN GABRIEL PERBOYRE (1802-1840) nació en Puech, en el sur de Francia, en una familia pobre pero muy religiosa.
El niño Jean-Gabriel nació en la difícil época de las guerras de Napoleón Bonaparte. Dos hermanos suyos ingresaron al seminario de Montauban, en Tarn-en-Garonne. Siguiendo su ejemplo, él también decide consagrar su vida a Dios.
Así, a los dieciocho años se encuentra estudiando teología en París, en la casa madre de la congregación de los Lazaristas, y es ordenado sacerdote en 1826.
Durante casi diez años, San Juan Gabriel Perboyre fue maestro de novicios en la misma Casa, pero en 1835 vio la oportunidad de realizar su sueño misionero, y se embarcó rumbo a China.
Primeramente llegó a Macao, donde se preparó varios meses para su misión estudiando chino, y al cabo fue designado primer vicario general en la provincia de Honán, al centro sur de China.
En este lugar realiza una labor apostólica intensa. Después de un año y medio, en 1838 es transferido a la provincia de Hupeh, donde renueva sus esfuerzos misioneros.
Al poco tiempo, sin embargo, se desató una cruenta persecución anticristiana, y los predicadores europeos se vieron obligados a dispersarse e intentar huir a sitio seguro.
San Juan Gabriel pasó algunos meses escondiéndose, pero un joven que siempre había sido amable y se había mostrado fiel, lo traicionó revelando a las autoridades su paradero.
En consecuencia, fue capturado en septiembre de 1839 en Tchayuenkeu y llevado a Kwangytang, el primer lugar donde lo interrogaron y torturaron. Luego de repetir esta rutina en varios lugares, terminó recluido en la infame prisión de Wuchang.
Condenado a muerte, San Juan Gabriel Perboyre soportó largos meses de torturas chinas, hasta que llegó la ratificación de la sentencia por parte del emperador. Sus verdugos lo crucificaron, igual que a Jesús, y durante su agonía lo siguieron haciendo sufrir con golpes de espada.
El proceso de beatificación se inició al poco tiempo de su muerte, pero no fue sino hasta 1996 que San Juan Gabriel Perboyre fue canonizado por el papa Juan Pablo II.
SAN JUAN GABRIEL PERBOYRE nos enseña el valor de conservar la fe hasta las últimas consecuencias.
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¡Oh mi divino Salvador! has, por tu omnipotencia y tu infinita micericordia, que yo cambie y me transforme totalmente en Ti.
ResponderEliminarQue mis manos sean las manos de Jesús, que mis ojos sean los ojos de Jesús, que mi lengua sea la lengua de Jesús, que todos mis sentidos y todo mi cuerpo sólo sirvan para glorificarte; pero, sobre todo, transforma mi alma y todas sus potencias: que mi memoria, que mi inteligecia, que mi corazón, sean la memoria, la inteligencia y el corazón de Jesús!.
que mis operaciones, mis sentimientos sean semejantes a tus operaciones, a tus sentimientos, y que, como tu Padre decia de Ti: “Yo te he engendrado hoy”, puedas Tú decir lo mismo de mi y agregar también con tu Padre celestial: “He ahi a mi hijo bienamado objeto de mis complacencias”.
Qué en la Gloria estés San Juan Gabriel Perboyre junto a todos los seres celestiales.Toda tu vida un ejemplo de entrega incondicional.Lástima que tuviste que sufrir la traición de alguién en quién confiabas y luego todo lo demás.
ResponderEliminarSan Juan Gabriel , en esté día te pido humildemente intercedas ante nuestro Señor Jesucristo , si así El lo tiene previsto a favor de la restauración de la salud de mi hija María Victoria. Que nuestro Señor,doctor de doctores , ilumine el el camino de vida de mi hija y la lleve hacia la sanación.Jesús!...confió en ti.
Santísima Virgen María,te ruego que pongas bajo tu manto y protejas amorosa y maternalmente a mi hija y la llenes de bendiciones.
Virgen María!... siempre estas presente en mis oraciones y este ruego en especial,confió ser merecedora de tu gracia.Amén.
Angeles de la Guarda: San Miguel, San Gabriel, San Rafael y San Uriel ,tengan bajo vuestra atenta protección y cuidado , de noche y de día a mi hija.
Pido perdón por mis pecados de la misma forma que perdono a los que me faltaron.
San Juan Gabriel, fortalece mi fe, esperanza y ánimo.
Qué así sea. Amén. Gracias.
San Juan Gabriel Pervoyre, intercede ante Dios para que Europa y América no sean indignos de la Nueva Alianza y el Señor no nos retire su favor por impíos.
ResponderEliminarSAN JUAN GABRIEL DE PERVOYRE, QUE SUFRISTE CALAMIDADES ESPANTOSAS EN CHINA TIERRA AJENA AYUDA AMIS HIJOS AENCONTRAR LA CASA ADECUADA Y GUIALOS POR DONDE SEA NECESARIO Y QUE LA SANTISIMA TRINIDAD NOS BENDIGA Y LA VIRGENCITA SANTISIMA NOS CUBRA CON SU MANTO AMEN Y POR LAPAZ DEL MUNDO ENTERO AMEN
ResponderEliminarSAN JUAN GABRIEL PERBOYRE:DE ORIGEN MUY HUMILDE,MARTIR,MUY LEJOS DE SU TIERRA SUFRIÓ EL MARTIRIO.EVANGELIZANDO EN CHINA, TE DENUNCIARÓN MARTIRIZANDOTE,CÓMO MURIO JESUS CRUCIFICADO.ES UN LLAMADO PARA PERSONAS CON UNA FÉ INCREIBLE,EL DE EVANGELIZAR EN TIERRAS TAN DISTANTES,CON COSTUMBRES TAN DIFERENTES;PERO A LOS OJOS DEL GRAN HACEDOR DEL UNIVERSO,TODOS SOMOS IGUALES,SOMOS HERMANOS EN LA FÉ DE CRISTO JESUS.DIOS TEN ENCUENTA A LOS QUE LUCHAMOS POR LA PAZ DEL MUNDO, POR SIEMPRE DIOS VERDADERO UNO Y TRINO,POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS AMEN JESUS.
ResponderEliminarSAN JUAN GABRIEL DE PERBOYRE TE AGRADEZCO TODO LOS QUE HICISTE POR MIS HERMANOS EN ESE ENTONCES POR TODO LO QUE AYUDASTE A QUE SE DIFUNDIERA LA RELIGION CRISTIANA SIN IMPORTARTE NADA COMO ERA LO MAS SE3GURO QUE OBTENDRIAS LAS MUERTE PERO NI ESO TE HIZO ACAYAR SEGUISTE FIEL A CRISTO Y AL PADRE CELESTIAL POR ESO LE SUPLICO A DIOS Y A SU HIJO JESUCRISTO QUE TE TENGA EN SU GLORIA SIEMPRE POR QUE TU SERA UN EJEMPLO PALPABLE DE TODO LO BUENO QUE TAMBIEN DEBEMOS HACER NOSOTROS HOY EN DIA.
ResponderEliminarSAN JUAN GABRIEL DE PERBOYRE POR HABERTE TOCADO PADECER LO QUE PADECIO EL HIJO DE DIOS TE PIDO QUE CON TU SANGRE SANTA RIESGALA Y ESPACELA POR LOS PECADORES Y AUMENTALES LA FE POR TU CRUCIFIC CION Y TORTURAS QUE SUFRISTE TE SUPLICO INTRECEDAS ANTE EL PADRE CELESTIAL POR LA SALUD DE MIS AMIGOS MARIA VICTORIA, JORGITO, EIMY YAEL Y SONIA PARA QUE OBTENGAN ESA SALUD SANA QUE TANTO HAN ESPERADO, TAMBIEN TE PIDO PÒR LA LIBERTAD DE MIS AMIGOS ORLANDO, ALVARO, OSCAR DIEGO Y EL MAESTRO OSORIO PARA QUE TERMINE SU SUPLICIO DE LA PRISION LO MAS RAPIDO POSIBLE AMEN AMEN AMEN AMEN AMEN AMEN GRACIAS GRACIAS GRACIAS SAN JUAN GABRIEL DE PERBOYRE AUMENTA MI FE Y LA DE MIS HERMANOS AMEN AMEN GRACIAS GRACIAS TOÑO RAMIREZ.
SAN JUAN GABRIEL TE AGRADEZCO QUE ALLAS PUESTO LA RELIGÍON CRISTIANA JUNTO CON DIOS SIEMPRE APOYANOS Y AYUDANOS,NUNCA TE SEPARES DE NOSOTROS.
ResponderEliminarAMÉN